Lunes 5 de marzo. Unir la palabra y la mirada. El sonido y los ojos. Me someto al deseo de escuchar y mirar.

Los padres que nos dan la vida también nos dan la muerte. Supongo que eso es lo que no me perdonan mis hijos. Hubiera preferido que recibieran mi pasión por el Arte para que la realidad no los mate. No he sabido hacerlo. Supongo que me ven como un vulgar ególatra y narcisista enamorado de lo que hace y piensa. Alguna vez creí que tan solo hacia falta quererlos y decirlas la verdad.

Martes 6 de marzo. Sin imaginación no hay deseo. Vivir está bien, pero es como si fuera obligatorio. La mediocridad se alimenta del posibilismo superficial y la familia tipo les da de comer para que no quieran otra cosa: títulos y buenas calificaciones. Malos tiempos para la lírica. Se decía. ¿Se dice?

Los lideres se ven en la derrota. Cuando no viene nadie al Teatro. Cuando las cosas salen mal es cuando se pueden sacar buenas conclusiones.

Miércoles 7 de marzo. Futbol. Hace un tiempo y gracias a Dante Panzeri era la dinámica de lo impensado. Hoy sigue siendo dinámico, pero casi pensado para y por el dinero. El futbol que ya no es lo que era sigue despertando en mí una cierta emoción.

El objetivo máximo es siempre ganar. Los principios que se eligen para eso casi no rigen en el futbol de nuestro tiempo. La exigencia con un estilo de juego esta casi excluida de lo que se puede elegir y no elegir. Por eso estrenamos en Rosario, El Trinche. El mejor futbolista del mundo.

Jueves 8 de marzo. El mejor director es el que aparenta no estar. El que le hace creer al actor que todo lo que ocurre le pertenece al que actúa. El que dirige debe ser un guardián de la técnica no de las ideas que le surgen en su casa.

El valor esta en lo profundo de un proyecto. La idea que lo sostiene. No por la cantidad de público que convoca.

La muerte es algo tan inevitable y natural que no deberíamos pensar ni un segundo en ella. Por eso la anticipación es la enfermedad congénita del actor. Trata de evitar la muerte y eso es precisamente lo que lo mata.

Viernes 9 de marzo. Ayer la mujer salió a la calle a demandar lo que le pertenece. Esto es como esa vieja maldición judía. Ojalá te metas en un pleito en el que tengas razón. La mujer pleiteando por algo absoluta y totalmente justo. Aun así, la alegría de las calles es reparadora.

Voy a ver Lulú al Bellas Artes. Viejos recuerdos del 2008 y una realidad aterradora. Todo, pero todo solo para ser dicho y alguna mujer desnuda para entretener. Me he sentido avergonzado.

Noam Chomsky. A los 90 años.” La desilusión con las estructuras institucionales ha conducido a un punto donde la gente ya no cree en los hechos. Si no confías en nadie, por qué tienes que confiar en los hechos.”

Hay que buscar. Hay que buscar y encontrar a quienes creer para poder hacer lo que queremos con aquellos a los cuales creemos. Hay que superar el egocentrismo institucional.

Domingo 11 de marzo. Bea Melgares y Sergio Milán. Descubren para mi esa otra cosa que Arrabal no escribió. Fando y Lis. Máxima libertad y máximo de compromiso con un máximo de técnica. Eso es Teatro.

Lunes 12 de marzo. Algo muy horrible a veces nos atrapa. Nos llama. Nos encandila. La cabeza no entiende, el cuerpo sí. Podríamos denominarlo la horrible belleza. Es eso.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

6 comentarios

  1. Sabio es aquel que mira y escucha, porque al hacerlo cambia la percepción, nos sintoniza.
    La pasión por el arte llega, la irradias. Tus hijos la reciben, haciéndola suya de maneras que quizás desconoces, estoy convencido.
    La anticipación es el monstruo, sí. Tanto en las tablas, como en la vida. La ansiedad en ambas parcelas, nos juega casi siempre malas pasadas.
    De la horrible belleza podría decir, que mi cuerpo a veces me devuelve, se hace herida, patalea, se comunica de esa forma tan suya, para hacerme visible que la mente está capitalizando más territorios de la cuenta.

    Leerte es verdad y belleza.

  2. Querido Jorge, estaba casi muerta de sed… y me envías una fuente de agua. Sabor dulce, sabor amargo, pero al fin y al cabo agua para calmar mi sed. Gracias desde aquellos años, gracias por ayer y gracias por ese mañana que yo pensaba inexistente. Un fuerte abrazo.

Responder a Eusebio Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *