Uno.
Cada día me pido a mi mismo una química cada vez más ingenua. De esa forma podríamos ser más libres, producir más, consolidar espacios de creación con aquellos con quienes durante un tiempo, hacemos chispas.
Ningún actor es mejor que todos juntos. Nos cuesta mucho entenderlo. Cuando eso ocurre podemos descubrir que lo ético no es necesariamente un camino hacia la soledad. Cuando nos acompaña un grupo de trabajo, lo entendemos.

Dos.
No voy a salvar al Arte del Actor de la parte mala de sí mismo. No pretendo ocuparme de esa tarea. De eso ya se encargará la historia.
Lo que deseo es poder seguir dedicándome a lo que amo. Pero no al modo Facebook resolviéndolo con un Me Gusta. Quiero concentrarme en la parte de un todo hasta el límite de mis posibilidades.
A los actores los percibo como una fuente de inspiración y dolor. He tenido de todo al respecto. Ahora, cuando Tejido Abierto Teatro ha comenzado su trayectoria en Buenos Aires, con los actores surgidos de lo que hemos hecho juntos en los últimos años, asumo que el riesgo de un viaje inaugural no me da ninguna pereza.
Quiero implicarme corriendo el riesgo real de querer a la gente con la cual trabajo, en España y en Argentina.

Tres.
Tengo mala memoria. Hago el esfuerzo de recordar lo olvidado y por eso puedo decir que algo de memoria me queda.
Tantas derrotas acontecidas me han permitido entender que me autoengaño de maravillas. Demasiados libros escritos. Demasiadas reflexiones en este Blog. Miles de ensayos y clases para descubrir ínfimas certezas.
Me ha salvado mi pasión por el conocimiento. Por lo menos de la codicia y el lucro. Sin embargo no he podido sentirme no afectado por el desprecio. No lo consigo.
La añeja y estúpida batalla del reconocimiento. Debe ser que incurro en la vanidad de creer que tengo algo interesante que trasmitir.

Cuatro.
Dicen: “Hay tontos que creen que no ganar dinero tiene algún sentido. Un romanticismo anticuado deudor de lo peor de los años 70. Hacen creer a la gente que el Arte es un ansiolítico.”
Pues no. No es así. No es mi postura condenar a los actores en nombre del Arte a la muerte por inanición. No se opta por morirse de hambre y regalar el trabajo. Eso no es una opción. Eso es: no dejarse matar por las leyes del mercado que le imponen al arte un lugar de objeto. Una mercancía de compra y venta.
Intentar que quien actúa no confunda ser profesional con ganar dinero no es condenar a los actores a que no ganen dinero.
Un actor que aprende una técnica y la sostiene contra viento y marea, se cambia a sí mismo. Miles de actores que aprenden una técnica y la sostienen en la realidad, cambian el Arte del Actor.

17 comentarios

  1. Sin la ingenuidad no podríamos sorprendernos de lo que nos rodea. Necesitamos la ingenuidad para sobrevivir en un mundo con tanta malicia que no permite RIESGOS sino formulas. Formulas que no generarán más cosas que las que ya hemos visto y tenemos. Y ese riesgo nos puede llevar a los fracasos que generarán la necesidad de seguir trabajando para salir de ahí… o generarán victorias que no sirven más que para seguir trabajando… Pero creo que el riesgo es fundamental, sin él nos estancamos, Jorge. Debemos saltar ese trampolín con la esperanza que la piscina tenga agua. Si no la tiene, espero encontrarme a un grupo de actores que pueda recibirme y remar juntos para salir de esa y buscar otro trampolín.

    La batalla del reconocimiento la tienes más que ganada. Si otros desprecian es problema de ellos. Quizá te ayude a vivir mejor mirar a través de no ver la necesidad de reconocimiento por el desprecio de otros, sino que, desde quienes te acompañamos en tus libros, tus clases, tus obras y quienes creemos en ti al momento de pisar un escenario en cualquier parte del mundo. De quienes al poner un pie en escena y aplican lo que se ha forjado en tus seminarios, tus clases, tus charlas o tus libros. De quiene llevamos tu huella de lo aprendido y vivido en la vida y en el teatro… el reconocimiento se encuentra en eso… lo que desprecian, que se vayan a la mierda.

    Un abrazo grande desde Paris, gracias a ti…

  2. Cuando acudo a un ensayo me creo profesional, y no gano nada, no me ve nadie, no vendo nada, simplemente nos entregamos al maximo. En Asturias existe una lucha constante con el Teatro profesional. Aun no entiendo que buscan, si no nos respetamos nosotros mismos, quien espera ser respetado. Gracias Jorge una y mil veces, aun en la distancia crezco contigo.

  3. Etapas. Como si fuese un huerto. No se puede coger en verano lo que no se cosecho en invierno, obvio, pero, dicen los expertos de la hortofruticultura, que tampoco se pueden plantar almendras en las paredes y esperar que salgan cebolletines. Pues yo les digo que si! Asi que si alguien esta dispuesto a morir de hambre por esta profesion es que que no esta dispuesto a dejar un ensayo por un Me Gusta, este, esa, ese, aquel. A mi me han retirado tantas veces las ganas de ensayar por pasar el tiempo en nombre de muchos valores inocuos, que hasta que no cogi mi propio espacio de trabajo, mi propia obra, mi propia expresión, mi propio lugar en este arte, no pude desembarazarme de las ataduras del dia a dia que nos impiden decir, por que no voy a poder? y por que no lo podre hacer solo? Tal vez este sea el proximo muro contra el que debere estrellarme. Pero en ese si que voy a poner Me Gusta. Como tú. Gracias porel espacio. Espacio de encuentro en el que uno no se siente «tan» solo. Ya te encontré.

  4. Todo actor necesita de sus compañeros. En escena no somos nada sin el otro. Un esfuerzo que no se dirige al otro se queda en la nada, sin embargo cuando trabajas para el otro, ese esfuerzo se convierte en una sinergia y el resultado no es equivalente a la suma de actores que hay en ese momento en escena. Se convierte en algo más, algo superior en el que todos se vuelven parte de uno y todos se vuelven imprescindibles.
    Sin los otros, jamás nos sería posible superarnos a nosotros mismos, porque para eso también necesitamos a los otros. Los otros nos ayudan, nos aconsejan, nos aman, nos odian.
    La verdad que todos deberíamos entender bien esto que explicas en el blog. Creo que ahí está la clave de muchas cosas.
    Muchas gracias por escribir estas cosas Jorge. Personalmente me sirve para seguir remando con muchas más fuerza, sobre todo en estos tiempos tan difíciles para todos.
    Un abrazo maestro

  5. Gracias por compartir estos pensamientos, Jorge!
    Su lectura resulta muy gratificante para mí!
    Tal vez porque siempre me ha maravillado esta sensación de comprobar que al margen de las distancias, hay alguien con quien, sin conocernos, tenemos tantos puntos en común!
    Con un abrazo, ojalá sigamos en contacto.

  6. Una amiga mía vitoriana me decía que ahora que nadie espera nada de nosotras, es cuando tenemos que ponernos en marcha… Estoy viviendo mi futuro, la barca ( Alfonsina Storni)que apenas apreciaba en el horizonte, lentamente va acercándose a la orilla….Cuando me acerqué a la técnica interpretativa hace como 20 años, venía de un intenso borrado intelectual que me llevó a reiniciarme desde los más íntimos detalles…Ahora siento que vuelvo de nuevo a empezar , pero desde otro lugar , no sé si más rico, pero sí mucho más amable….y con el sentimiento de querer ser humilde, aunque a veces reconozco que no lo soy.
    La química ingenua, la entiendo como la que dió lugar a la vida, por no sé qué procedimientos azarosos, como una alquimia teatral que nos lleva a sentir cerca el arte de actuar…. (y cerca también de los compañeros de viaje).
    De vuelta, con la maleta llena de cosas que no sirven para nada, pero que me resisto a tirar…y me entorpecen la acción, aunque con la obstinación de hacerme cargo de mí misma.
    Ese teatro, tal vez, el que es un proceso de muchos procesos, lleno de derrotas y victorias, y presiento además que esa quimica ingenua, nos relacionará con el principio , tal vez caótico del encuentro entre diferentes, que a su vez nos llevará a la búsqueda de ese algo que nos pudiera pasar….
    Estoy donde debo y quiero estar…

  7. Un hombre sabio con quien compartí 18 años una vez me dijo «El trabajo no es mercancía», hoy usted dice que el arte no es mercancía. El arte es trabajo, es nuestro trabajo y aunque para muchos sea inentendible nosotros amamos nuestro trabajo y si es nuestra obligación es porque deseamos y queremos que sea nuestra obligación, nos relacionamos con nuestro trabajo como todo el mundo desearía relacionarse con el suyo y lo hacemos tan seriamente que hasta somos capaces de hacerlo sin ganar dinero o sin ganar el dinero que nos corresponde como retribución. Salud Tejido Abierto!

  8. Querido : Filosofía del arte. Lo que mas me conmueve cuando te leo, es que encuentro al mismo Jorge con el que hablaba hace 40 años pero destilado. La misma inteligencia, el mismo corazón. Siempre serás para mi una de las certezas de mi vida. Te quiero mucho y te mando un abrazo enorme. Ah!, me olvidaba… ingenua pero orgánica…la química, digo…

  9. Hola maestro!! después de tanto tiempo me digno a escribir en este blog,desde el que siempre observe furtivamente,cuando toca abandonar el refugio, después de un proceso,abrir la puerta de la escuela ´´por ultima vez´´ sentir esa sensación de vació absoluto,
    necesitamos la técnica,pero como todas las dependencias tienen sus cadenas que frenan,es ahora cuando caigo en esa ingenuidad necesaria de no saber que esta ahí,para actuar desde la ituicion de uno mismo,la libertad y al mismo tiempo gracias por que este ahí,un abrazo.

  10. Yo no creo que sea vanidad de lo que pecas, Jorge. Más bien al contrario, me gustan tus textos porque dotan de realidad al arte del actor. Porque tienen los pies en el suelo y se hacen comprensibles y, espero, interesantes a la gente que simplemente quiere conocer como puede funcionar la filosofía teatral. Formamos parte de una disciplina que, debido a la gran renovación que tuvo en el siglo XX en Europa, se alejó enormemente de la cotidianeidad, y tú eres de los pocos maestros que conozco que, como en su momento hizo Stanislavski, tratan de hacerla más real, más cercana al día a día.
    Así que no, Jorge, no creo que incurras en la vanidad de creer que tienes algo interesante que transmitir. Es un camino lento, pero cada vez somos más los que te acompañamos.

  11. Una frase de Pessoa para comenzar el año en tu blog: » Ni placer, ni poder, ni gloria. La liberta, sólo la libertad»

  12. Entro al Blog y respiro. Fuerte hacia dentro y encuentro los sitios para vivir que a veces desaparecen. Creo que este extraño territorio de miradas llenas de complicidad entre el arte como gran verdad y la filosofia como gran alimento, me ayudan a recordar que hay cosas que la gente del Arte no debería olvidar.
    Samuel Bolton

  13. Siempre la reflexión, leer, escuchar y ver la propuesta de Jorge Eines me llevan a la reflexión. Pienso en su objeto de estudio. Asocio con otros pensamientos, «…Friedrich Schlegel por ejemplo escribe: «Todos los juegos sagrados del arte no son más que imitaciones lejanas del juego infinito del mundo, de la obra de arte que eternamente se está haciendo a sí misma». Cita de GADAMER, Hans-Georg, “Verdad y método, HERMENEIA 7: Fundamentos de una hermenéutica filosófica”.
    ¡Gracias Jorge! Un abrazo.

  14. Y entonces le da una vuelta a la sinceridad y aparecen conceptos pegados a la tierra. Una mezcla de tristeza y dignidad y me parece que el que quiera escuchar, que escuche.

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